Marina Abramovic, artista
serbia, nació en 1946. Al crecer en una familia partícipe en la Segunda Guerra
Mundial (su padre fue un comandante, llamado héroe nacional tras la guerra, y
su madre de igual manera fue comandante en la armada), Abramovic fijó su talento en representar la violencia
humana. Sus trabajos se caracterizan por explorar la relación que existe entre el artista y el
público, utilizando como método el desgaste del cuerpo, llevando al límite
tanto a la mente como la carne.
Escogí su trabajo ¨Ritmo
0¨ (1974) porque creo que representa el origen y la creación del arte: enmarcar
el hombre como especie. En su performance,
Marina Abramovic colocó 72 objetos mientras ella se paraba desnuda frente al
público. Los objetos podían ser usados para causar tanto placer como dolor a la
artista (habían tijeras, cuchillos, pistolas, rosas, etc.). Seis horas después,
Abramovic declaró: La experiencia que aprendí fue que... si se deja la decisión al publico, te
pueden matar... Me sentí realmente violada: me cortaron la ropa, me clavaron
espinas de rosas en el estómago, una persona me apuntó con el arma en la cabeza
y otra se la quitó. Se creó una atmósfera agresiva.¨. Con esto, la artista plasmó
al hombre como es, un ser violento, un animal al fin y al cabo, que es lo que
el mismo hombre siempre ha querido hacer a través del arte (definirse,
expresarse o representarse con el), motivo por el cual, en lo personal, me
parece una gran obra de arte.
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